Descripción
En estos últimos años se nos viene insistiendo en la ventaja que supone, para mantener la salud de nuestro sistema circulatorio, el sustituir las grasas animales saturadas por aceites con alto contenido en ácidos grasospoliinsaturados, ya que éstos son en su mayor parte ácidos grasos esenciales que como las vitaminas no pueden ser sintetizados por nuestro organismo y éste necesita tomarlos de los alimentos. La naturaleza ha puesto a nuestra disposición gran cantidad de pescados de aguas frías cuyo contenido en ácidos grasos esenciales es elevado, siendo uno de los principales EL SALMÓN.
El EPA y DHA forman parte en nuestro cuerpo de una cadena que da lugar a prostaglandinas con efectos biológicos muy interesantes. Todos ellos conseguidos por la adición a nuestra dieta de aceite de salmón, ya que éste es muy rico en EPA y DHA. Por ello este aceite tiene una aplicación nutricional importante.
Este aceite regula los niveles alterados de colesterol y triglicéridos, siendo esencial para la prevención de los problemas cardíacos (arterioesclerosis, aterosclerosis, trombosis, tensiones altas, infartos de miocardio, etc.). Y mejora los estados de asma y alergia, por lo que es necesario incorporarlo a la dieta.
Respecto a las contraindicaciones, el aumento del tiempo en sangría y la inhibición de la agregación plaquetaria podrían ser peligrosos para aquellos pacientes que reciban otros tratamientos anticoagulantes, incluida la aspirina. Posiblemente tampoco estaría indicado este tipo de tratamiento en individuos con alteraciones biliares. Consulte con su médico.
Complemento alimenticio rico en ácidos grasos omega 3
INGREDIENTES: aceite de salmón 71% (500 mg/cápsula), gelatina comestible, estabilizador (glicerina).
RECOMENDACIÓN DE CONSUMO: de 4 a 6 cápsulas al día.
PRESENTACIÓN: envases con 220 y 450 cápsulas.